Uno de las cosas que más me gusta de la fotografía es jugar con la luz.
Ya sabemos que la palabra fotografía justamente significa pintar con luz.
Tenía ganas de hacer algo curioso, así que no se me ocurrió otra cosa que intentar hacer unas pruebas con un puntero láser que utilizo en salidas nocturnas de astronomía.
Le pedí a Bea, que se prestase al invento y este es el resultado (muy a lo Matrix):
Forma de hacerlo:
– Utilicé un láser muy potente, de 532 nm. No lo suficiente como para hacer daño, pero sí para tener cuidado y pedirle a la modelo que cerrase los ojos durante toda la toma.
– La cámara, con un 17-40 L, ISO 100, f 8 y 67 segundos de exposición.
– Hay que utilizar trípode y un disparador remoto para evitar el movimiento de la cámara. Aunque eso sí … el láser no hay que dejar de moverlo ni un instante si queremos que la iluminación sea uniforme.
– Tiene que existir total oscuridad, lo único que ilumina es el láser.
– Debemos separar a la modelo del fondo para que no se ilumine con sombras, ni con el propio láser.
– La modelo debe ir vestida de blanco, algún tipo de top, pantalón corto, ropa de baño, etc …. pero sólo blanco y sin pendientes, colgantes, hebillas, etc.
– Hay que experimentar, experimentar, experimentar. Y experimentar 😉
Nota: La foto no tienen ningún retoque posterior. Sólo la conversión de RAW a JPG para su publicación.